En la era de la sostenibilidad y la eficiencia energética, las empresas se enfrentan al desafío de minimizar su huella de carbono mientras optimizan sus operaciones para reducir costes.
Y aquí cobra vital importancia la lucha contra los consumos fantasma de energía. Estos consumos, también conocidos como cargas eléctricas ocultas, pueden parecer insignificantes individualmente, pero en conjunto representan una porción considerable del gasto energético innecesario dentro de una organización. ¡Hasta el 10% de tu consumo en la factura!
En este contexto, Fision, como consultor energético, presenta estrategias y soluciones innovadoras para identificar y erradicar estos consumos invisibles.
¿Qué son los consumos fantasma y por qué ocurren?
Los consumos fantasma de energía, también conocidos como carga fantasma o consumo en standby, se refieren al gasto energético generado por dispositivos y equipos eléctricos que permanecen encendidos o en modo de espera cuando no están en uso activo.
Este fenómeno ocurre en la mayoría de los entornos empresariales, desde oficinas hasta fábricas, donde la maquinaria, los ordenadores, los cargadores de dispositivos y otros equipos siguen consumiendo electricidad aun estando aparentemente «apagados» o en modo de suspensión.
La razón principal detrás de los consumos fantasma es el diseño de muchos dispositivos modernos, que para ofrecer comodidad y rapidez de uso, nunca se apagan completamente. En su lugar, pasan a un estado de baja energía que les permite reactivarse rápidamente.
Si bien esto aporta beneficios en términos de comodidad y eficiencia operativa, también conlleva un coste energético constante que muchas empresas no identifican fácilmente como un área de ahorro potencial.
Herramientas y técnicas para detectar consumos ineficientes
Para combatir los consumos fantasma, el primer paso es identificar dónde y cuándo ocurren. Esto se puede lograr mediante el uso de varias herramientas y técnicas diseñadas para evaluar y monitorizar el consumo energético en tiempo real.
Algunas de estas herramientas incluyen:
Medidores de energía inteligentes: estos dispositivos se instalan en el sistema eléctrico de la empresa y proporcionan datos detallados sobre el consumo de energía en tiempo real. Permiten identificar patrones de consumo y detectar áreas donde los consumos fantasma son más prevalentes.
Monitores de energía plug-in: perfectos para evaluar dispositivos individuales, estos monitores miden el consumo de energía de cualquier equipo conectado a ellos.
Auditorías energéticas profesionales: realizadas por consultores energéticos especializados, estas auditorías ofrecen un análisis exhaustivo del consumo energético de una empresa. Identifican no solo los consumos fantasma sino también otras áreas de ineficiencia energética.
Estrategias para reducir los consumos fantasma
Los consumos fantasma de energía en las empresas pueden ser difíciles de detectar pero, una vez identificados, existen estrategias efectivas para reducir o eliminar estos gastos innecesarios.
Repasemos algunas de ellas:
Apagar o desconectar equipos:l acción más directa es apagar o desconectar los equipos que no están en uso. Esto incluye computadoras, impresoras, y otros dispositivos electrónicos que a menudo se dejan en modo de espera fuera del horario laboral.
Uso de regletas con interruptores: utilizar regletas que se puedan apagar completamente evita que los dispositivos conectados consuman energía cuando no están en uso.
Gestión de la energía en equipos: configurar la gestión de energía en computadoras y otros dispositivos para que entren en modo de ahorro de energía después de un período de inactividad puede reducir significativamente el consumo.
Tecnología y dispositivos inteligentes al servicio del ahorro energético
Sensores de presencia: instalar sensores de presencia para controlar la iluminación y el aire acondicionado puede reducir el consumo en áreas poco utilizadas.
Termostatos inteligentes: los termostatos inteligentes ajustan la calefacción y la refrigeración basándose en la ocupación real y las preferencias, optimizando el uso de energía.
Iluminación LED inteligente: reemplazar la iluminación tradicional por LED inteligente, que puede ser programada y controlada remotamente, ofrece una reducción significativa en el consumo de energía.
Estas estrategias, combinadas con un compromiso hacia la eficiencia energética y la sostenibilidad, pueden llevar a una reducción significativa de los consumos fantasma de energía.
Impacto de los consumos fantasma en la factura energética de tu empresa
Los consumos fantasma, aunque a menudo invisibles, tienen un impacto tangible y significativo en la factura energética de cualquier empresa.
Estos consumos se refieren a la energía utilizada por equipos y dispositivos que permanecen en modo de espera o continúan consumiendo electricidad incluso cuando no están en uso activo.
Este gasto energético «invisible» puede representar hasta un 10% de la factura eléctrica total de una organización, dependiendo de la cantidad y tipo de dispositivos implicados, así como de las prácticas operativas.
Beneficios económicos de gestionar eficientemente estos consumos
La gestión eficiente de los consumos fantasma ofrece beneficios económicos directos e indirectos significativos para las empresas. Al reducir o eliminar estos consumos innecesarios, tu empresa puede ver una disminución notable en sus facturas de energía.
Creación de una cultura de ahorro energético en la empresa
El primer paso hacia la prevención de consumos fantasma es fomentar una cultura de ahorro energético dentro de la organización.
Esto implica educar y sensibilizar a todos los miembros de la empresa sobre la importancia de la eficiencia energética y su impacto tanto económico como ambiental.
Herramientas para la monitorización
La tecnología juega un papel crucial en la monitorización y gestión del consumo energético.
Existen diversas herramientas y sistemas diseñados para facilitar este proceso, permitiendo a las empresas detectar y actuar sobre los consumos fantasma de manera eficiente.
Implementar un programa de mantenimiento y monitorización continua es esencial para prevenir eficazmente los consumos fantasma y promover una gestión energética eficiente.
Al combinar una cultura de ahorro energético con el uso de herramientas tecnológicas avanzadas, las empresas pueden lograr no solo una reducción significativa en su factura energética, sino también avanzar hacia sus objetivos de sostenibilidad y responsabilidad social corporativa.